Cuando el gobierno sustituye las mascarillas por las sonrisas, cuando hacemos por quinta vez la desescalada rápido y mal tenemos como resultado una quinta ola (cinco ya y parece que no hemos aprendido nada ..) que ha echado por tierra la tan deseada llegada masiva de turistas, el frenado en reservas ha sido considerable porque todos los países de Europa a día de hoy no aconsejan a sus ciudadanos viajar a España y esto provoca que se vean frenadas las esperanzas de recuperación de un sector que es clase en la economía española.
Países Bajos se sumó esta pasada semana a los mercados emisores que retiran de su lista de viajes seguros a destinos en España, igual que el día antes lo hizo el Reino Unido, lo que afecta especialmente a las islas de Canarias (Atlántico) y de Baleares (Mediterráneo), donde en sus playas ya notan las cancelaciones de reservas. El Reino Unido es el primer emisor de turistas para España, con 18 millones de visitantes en 2019, y aunque Países Bajos es el quinto, con 3,7 millones, supone otro varapalo para el sector turístico español, cuyo peso en la economía nacional ha caído a la mitad desde que comenzó la pandemia, además, la costa mediterránea en España también se resiente, aunque en menor medida al depender menos del turista extranjero y confía en el turismo nacional para salvar el verano, será esto posible? veremos.
Por ejemplo, la presidenta de la principal patronal hotelera de las Islas Baleares, María Frontera, vaticinó que se anularán reservas y algunos británicos que están en las islas se irán antes de los previsto si “no pueden permitirse pasar una cuarentena al llegar” de regreso a su país, cabe recordar que solo podrán viajar los ciudadanos que estén completamente vacunados, con la pauta completa y solo esos no deberán de guardar la cuarentena al volver a sus países. Otro ejemplo lo encontramos en la comunidad autónoma de Cataluña y es que el sector detecta un parón en las reservas en destinos muy dependientes del turismo extranjero, donde la ocupación ya es muy baja, de aproximadamente un 40 por ciento sobre lo que era habitual en temporada alta, al final dependerán del turismo nacional pero no será suficiente para salvar la temporada con lo que este año se seguirán acumulando perdidas a las del año pasado, desde luego que el sector del turismo lo está pasando realmente mal y eso se ve reflejado en la cantidad de personas que viven de que lleguen extranjeros a nuestras playas, a nuestras ciudades.
Otras zonas costeras de Cataluña notan incluso un mayor impacto, como el Maresme, que sufre una “sangría de cancelaciones” desde que países como Alemania o Francia recomendaran no viajar a España, con una ocupación que no llega al 10 por ciento en hoteles donde los clientes son básicamente extranjeros aseguró a Efe Jordi Noguera, el sector se resiente y son muchas las empresas que han tenido que cerrar y despedir a sus empleados, para muchas las relacionadas con la llegada de turistas este cierre será definitivo, también echan el falta ayudas desde la Generalidad de Cataluña, esta desgraciadamente lleva años pensando solo en una ilusa independencia y lo demás parece importarle poco, no en vano muchas empresas se han ido de Cataluña precisamente por el desgobierne que padecen desde hace muchos años, es lo que tiene votar independentismo.
El caso es que vayamos donde vayamos de nuestro país los extranjeros escasean en nuestras playas, la presencia de turistas extranjeros es residual en la Comunidad Valenciana ya que apenas alcanza el 10 por ciento del total en esta región, y los hoteles no están viendo aumentos de reservas, más bien al contrario. La asociación empresarial hotelera y turística de la región, Hosbec, asegura que tanto las restricciones de países europeos como las internas en España no favorecen la recuperación aseguró a EFE, en el resto de comunidades el panorama no es mucho mejor y es que todo es debido como hemos comentado a esa quinta ola, como viene indicando sanidad día tras día la curva de contagios de coronavirus está en ascenso en España, donde alcanza los 469 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos catorce días, un nivel considerado en el país de riesgo extremo de la enfermedad, además, el incremento se debe en especial a contagios entre jóvenes, que son los que no están vacunados, pues superan los 1.500 casos por cada 100.000 habitantes en los de 20 a 29 años, por lo que se está agilizando la vacunación entre ellos, ya que hasta ahora habían tenido prioridad grupos de mayor edad, otro problema es la escasez de vacunas y es que cuando queramos tener vacunada a toda la gente joven el verano habrá acabado y estaremos ya bien entrados en el otoño y quien sabe si el invierno.
Otro factor son las variantes del virus, las mutaciones, si cuando se empezó con la vacunación la inmunidad de grupo se lograría al tener vacunada a un 70-75% de la población ahora será necesario tener vacunado casi el 90% de la población para tener esa ansiada inmunidad de grupo que nos permitiría volver a nuestra tan deseada normalidad, la que habíamos conocido hasta que llegó esta pesadilla denominada Covid-19 y que se ha llevado a tantas personas y ha destrozado tantos negocios.